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Estaba claro que, tarde o temprano, Juanlu García volvería a subirse al baquet derecho de un coche de rallyes. El \"Geo\", como le apodan cariñosamente sus amigos, regresaba al copilotaje tras cinco meses de ausencia con su amigo Óscar Corona a bordo de su espectacular y \"atómico\" Renault Clio Sport.
El ex copiloto de Surhayén Pernía había dejado las carreras por motivos laborales íntimamente ligados a ellas. Sin embargo, García sigue llevando el veneno de los rallyes por dentro, y no se resistía a volver a la competición de una manera más activa. Volver a verle por las asistencias con la funda puesta (por cierto, aún con los logos de RMC Motorsport en ella), suponía el regreso un clásico del copilotaje para los aficionados puros, y eso era digno de agradecer.
Sin embargo, y al igual que le ocurría a su gran amigo Pernía, la mala suerte en forma de una avería (todo parece apuntar que en la bomba de la gasolina) hacían que Corona y Juanlu se quedasen fuera de carrera prematuramente. Demasiado pronto, de hecho. Pese a ello el \"Geo\" volvía a disfrutar de las carreras desde dentro del coche... Matando un gusanillo que recorría su cuerpo desde hacía cinco meses.