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Las expectativas eran muy altas y Pedro Antunes cumplió con creces el papel. Con un amplio currículum a los mandos del anterior Peugeot 208 R2, Pedro Antunes se posicionó en Castelo Branco como uno de los dos pilotos encargados de hacer debutar este nuevo coche, llegado a Portugal apenas unos días antes de le puesta en funcionamiento del certamen nacional, paralizado durante varios meses por la alerta sanitaria.
Con apenas unos kilómetros de test a sus espaldas antes del inicio del rallye, Antunes empezó ya el sábado marcando los mejores cronos, dejando muy atrás al resto de sus competidores, incluyendo a Pedro Almeida, quien estrenaba la otra unidad del 208 Rally4 que aterrizó en Portugal el pasado jueves. En cuanto a los R2, las diferencias fueron dantescas durante todo el fin de semana, cumpliendo así con un expediente que ya había sido anunciado.
El nuevo león el mucho más ágil, fácil de conducir y su mejor par motor le permiten transmitir al asfalto la potencia de su motor turboalimentado. Pierde espectacularidad con respecto al sonido del motor atmosférico de su antecesor, pero en cuando al rendimiento, será muy difícil que el 208 R2 pueda echarle carreras a este Rally4. En Portugal, Antunes ha puesto la primera piedra de un modelo que dará muchas alegrías a Peugeot en los siguientes años.