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El Rallye Jämsä iba a ser el rallye en el cual Esapekka Lappi y Janne Ferm rodasen en los tramos finlandeses preparándose para el Rallye de Estonia, el reinicio del Mundial de Rallyes que se llevará a cabo el próximo mes de septiembre. Por desgracia, un problema en el turbo en el tramo de test les ha llevado a abandonar antes de siquiera poder disputar un solo kilómetro.
Los fineses oficiales de M-Sport rodaban con la unidad privada del equipo JanPro Racing, una de las pocas vendidas del Ford Fiesta WRC – que a su vez es el World Rally Car más vendido de la tercera generación. El problema ha estado en que no había turbos de repuesto disponibles en Finlandia y, con las restricciones actuales en la situación post pandemia del coronavirus, no es posible que esté a tiempo para la prueba que se celebrará el 8 de agosto en los mismos tramos donde se ha celebrado de manera habitual el Rallye de Finlandia.
Por tanto, se espera que M-Sport organice unas jornadas de test en los próximos días de modo que tanto Lappi como Teemu Suninen rueden de cara a Estonia. Algo similar a lo que ya ha llevado a cabo Toyota Gazoo Racing, con sus tres pilotos (Elfyn Evans, Kalle Rovanperä y el seis veces campeón mundial Sébastien Ogier) teniendo una jornada de test.
Como dato curioso, no es la primera vez que a Lappi le ocurre algo en este tramo. Aquí fue donde hizo su último test con Citroën Racing el año pasado (con el C3 WRC ya llevando la actualización aerodinámica prevista para 2020) antes de que el equipo cortase con su programa en la categoría máxima del WRC.