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El comienzo del Rallye Ulster, prueba del Campeonato Británico de Rallyes, ha tenido lugar bajo una confusión reinante debido a las condiciones de pista. Los pilotos casi se han visto obligados a comenzar la prueba con neumáticos de seco pese a que la pista estaba mojada y la lluvia azotaba los tramos.
Los fabricantes de neumáticos presentes en el evento (Michelin, Dmack y Kumho, entre otros) tenían preparados los neumáticos de mojado para sus clientes, pero al estar considerado como rallye en condiciones de pista seca (pese a que había llovido durante la noche anterior) por los organizadores no podían utilizarlos. Esto llevó a que se enfrentaran a condiciones muy delicadas en un rallye de asfalto bastante complicado, con características similares a las del Circuit of Ireland entre otras pruebas británicas.
Más tarde la organización del rallye entró en razón y permitió el uso de neumáticos mojados, así como los lisos blandos con cortes para poder disipar el agua que estaba depositada en la carretera. De este modo los pilotos pudieron salir a pista, con Alastair Fisher seguido del piloto de Dmack y M-Sport Elfyn Evans, Jonathan Greer, Keith Cronin y Tom Cave.
