Inmenso derroche de calidad de Nil Solans en el Rally Serras de Fafe

Galáctico. Nil Solans salda su cuenta pendiente en el Campeonato de Europa de Rallyes. Hace unas temporadas un doble pinchazo le negó el triunfo en el Rally Islas Canarias. Allí también diluvió. Allí también sobresalió. En el norte de Portugal la meteorología amargó el fin de semana a los pilotos... excepto al de ARVidal. Mientras más agua golpeaba el techo de su Volkswagen Polo GTI R5, mejores registros realizaba.

La demostración del sábado permanecerá grabada en la historia. Como si retrocediésemos a la época de los Grupo B, en unos tiempos de amplias diferencias entre los cronos de los más rápidos, el de Matadepera endosaba segundos a sus rivales con una facilidad pasmosa. La única disimilitud con los años dorados del deporte es que en las carreteras de Fafe no hubo alternancia. El protagonista era siempre el mismo.

En la etapa de hoy las precipitaciones dieron una tregua y Solans hizo lo propio con sus contrincantes. Con un liderato que rebasaba la frontera del minuto y medio, se solidarizó con el resto y les permitió luchar por las victorias parciales, pero no por la que otorga los treinta puntos. En un momento de incertidumbre sobre su futuro exhibió todo su talento. Imposible que los potenciales patrocinadores no hayan tomado nota.

El estonio Georg Linnamäe se las prometía felices tras el 'Qualifying Stage' del viernes. Menos de veinticuatro horas le duró la alegría. En su misión por frenar la fuga de su predecesor se perdió con los reglajes de su Volkswagen Polo GTI R5. Nunca se recompuso del golpe más duro que recibió. Las circunstancias le forzaron a mirar hacia detrás, hacia un Armindo Araújo que arrolló sin piedad a sus compatriotas.

El pluricampeón portugués cumplió ayer en con el triunfo en su nacional. El objetivo de su campaña es el de recuperar el trono, por lo que evitó buscar su nombre en la clasificación del certamen continental. Con la entrada del domingo la situación cambió de forma radical. Ahora sí podía atacar y aplicar presión al de ALM Motorsport. El ídolo local lo intentó por todos los medios y en el Power Stage arrebató la plata a Linnamäe.

Sensacional fin de semana de Javier Pardo. Por su rendimiento parecía que había acumulado miles de kilómetros a los mandos del Škoda Fabia Rally2 Evo de RaceSeven. Pero no, lo estaba estrenando. Simone Tempestini, experimentado con los coches de esta categoría, abandonó por un accidente al tratar disputarle el cuarto lugar. El de Ourense había roto sus esquemas con dos contundentes scratchs en el último bucle. 

Alberto Battistolli, despacio y con buena letra, logró un resultado que hace unos meses ni rondaba por su cabeza. El curso pasado conoció las pruebas y en el presente refrenda lo aprendido. Su ritmo experimentó una evolución con la que dirigió su Škoda Fabia Rally2 Evo al quinto puesto, justo por delante de Bruno Magalhães. El oficial de Hyundai Portugal, en un día a modo de test, encuentra el camino con su nueva montura.

La remontada de Efrén Llarena llegó hasta la undécima plaza. El de Espinosa de Los Monteros salva unos puntos que podrían valer su peso en oro al término de la temporada. En el tramo de bonificación las condiciones y un trompo le privaron de añadir un extra su botín. A su espalda conluyó Luis Vilariño, muy emocionado al abordar la especial de Lameirinha, en la que se le removieron los recueros de la juventud.