El Dakar, una de las pruebas más duras, difíciles y complicadas del mundo del motor suele ser la primera piedra de toque para medir las manos, el talento y la cabeza de los pilotos que se postulan a ser estrellas del deporte, pero la prematuridad no es un fuerte en esta.
Con factores como la navegación, la gestión de las emociones, la madurez, el conocimiento del terreno y otros tantos puntos en donde uno tiene que ser preciso para poder desarrollar buen papel en el desierto, los principales contendientes a luchar por la conquista suelen ser los que llevan ya más años y kilómetros rodados. Son los que tienen más rodaje sobre el calor, las dunas, las piedras y el paisaje de horizonte sin fin.
Pero parece que hay un potencial nuevo rey del desierto en la categoría de dos ruedas. Con tan solo 19 años, y tras haber pasado por la recuperación de una lesión muy importante que le pudo dejar sin caminar hace un tiempo, el chico de La Garriga ha mostrado un poderío y una magistralidad encima de su KTM que le han llevado, en su primera participación en la prueba, a coronarse como el campeón de la categoría Rally2 del 2025. Cabe destacar también su octavo puesto final en la clasificación general de motos, quedando dentro de un top 10 repleto de estrellas del deporte que le sacan muchos años de experiencia e infinitas etapas al número 73 de la marca austríaca.
Está claro que hay que tener calma con el chico, es muy joven y se le tiene que dejar crecer a su ritmo, sin exigencias ni falsas esperanzas que puedan truncar su progresión o le fuercen a tomar decisiones para las que aún no está preparado, pero en lo que hay unanimidad en el entorno motor y, sobre todo Dakar, es que el catalán apunta maneras.
Cabe destacar también la gran gestión mental que parece que está realizando. Entrevistas muy serias, ambiciosas, pero no desmedidas y una claridad sin tapujos en sus declaraciones que crean en él una figura de la que se puede predecir un futuro que parece que augura muchos buenos momentos. Se debe hacer eco también del papel de sus mentores, sus propios compañeros de equipo, los veteranos Daniel Sanders, Luciano Benavides y el español de Honda Tosha Schareina, que parece que están muy encima suyo para ayudarle a engrandecer al máximo sus capacidades dentro y fuera de la competición.
Lo de este chico en las dunas de Arabia en estas semanas parece haber sido el preludio de algo muy grande…