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Mikko Hirvonen vuelve a trabajar ya en sintonía con los mecánicos e ingenieros de M-Sport. Como en los viejos tiempos... El piloto finlandés se ha convertido, de nuevo, en una pieza fundamental en el tablero del equipo de Cumbria. Y ayer (martes) se reencontró ya, dos años después de emigrar a Citroën, con los mandos del Ford Fiesta RS WRC; la última montura con la que llegó a luchar por el título mundial hasta el último rallye en el año 2011.
Poco después de haber presentado sus nuevos patrocinadores para 2014, Hirvonen hizo las maletas y se desplazó junto al resto del equipo M-Sport a Francia, donde completó ayer, dos días después que su nuevo compañero, Elfyn Evans [vídeo], su primera jornada de ensayos previa al Monte-Carlo; el rallye que establecerá el regreso del hijo pródigo a la vera de Malcolm Wilson.