La tercera etapa del Rally Dakar ha dado un auténtico vuelto a la general de la prueba tras los problemas mecánicos de Carlos Sainz en su rueda trasera inzquierda y el nuevo liderato de Nasser Al-Attiyah. Un cambio de posiciones que ahora obligará al piloto español a pasar al ataque y tratar de recortar los algo más de 30 minutos de desventaja, como explicó ante los medios.
"Estaba yendo francamanete bien, con buen ritmo, pero de repente he notado algo raro en la suspensión de atrás. Se ha roto una rótula. Hemos parado a cambiar y ni Lúcas ni yo estamos contentos por cómo hemos hecho el trabajo, porque se podía hacer más rápido", explicó en primer lugar.
"He seguido pero hemos pinchado. Tuvimos un problema con el gato en un error nuestro. No subía y tuvimos que subir el coche con unas rocas para cambiar la rueda. Al hacer eso hemos pinchado la otra, y en la reparación tuvimos problemas con un tornillo que no salía. Se nos ha roto la llave de las ruedas y hemos tenido que esperar a Ekstrom. Una película para no dormir", añadió Sainz.
"Ahora vamos a tener que cambiar de estrategia e ir al ataque también, así que compras papeletas para que te pasen a ti más cosas. Pero vamos a intentarlo y por nosotros no va a quedar", explicó un Sainz que ahora marcha octavo en la general.