Ott Tänak debutó hace un año con Hyundai en Monte-Carlo. El estonio lo hizo con un fuerte accidente en el tramo Saint-Clément - Freissinières del viernes, donde tanto él como Martin Järveoja, su copiloto, salieron ilesos.
El Hyundai, gravemente dañado, salió ladera abajo, terminando a más de 100 metros de la carretera. Este mismo tramo está en la prueba inaugural de 2021, pero a Tänak no le preocupa esto: "Eso fue hace mucho tiempo ya y no fue mi primer accidente", comenta.
"El año pasado no fue fácil, pero estoy contento con lo bien que nos las arreglamos para trabajar junto con el equipo durante estos tiempos difíciles, y creo que todo eso nos hace más fuertes para la temporada 2021", dijo el campeón de 2019.
Para el piloto estonio, Monte-Carlo “es un rallye cambiante, en el que tienes que pensar más y averiguar cuál es la mejor opción”. A Tänak no le importa ese accidente de 2020, su objetivo es “el título de pilotos”, y para ello asegura que necesita “sumar una puntuación muy alta en cada prueba”, añadió.
“En general, el desarrollo del coche ha ido bien desde el año pasado, hemos evolucionado mucho y el coche no es tan similar como antes. No creo que debamos estar muy lejos con el coche que tenemos", dijo Tänak respecto a su Hyundai y sus sensaciones. Un Hyundai al que considera que “no hay mucho más que cambiar”, ya que será el último año de esta generación.