Con su programa aún por confirmar, Pierre-Louis Loubet no quiere dejar nada en el aire y ya está en busqueda de un nuevo copiloto que sustituya a Vicent Landais, quien presumiblemente correrá junto a Ogier el año próximo.
Por ello, Loubet competirá junto a Nicolas Gilsoul, con un Ford Fiesta Rally2, en un rally en Francia este próximo fin de semana , con la vista puesta en una posible unión de futuro.
El joven piloto francés de 25 años ha sido una de las revelaciones del año, ya que tras una complicada temporada a los mandos del Hyundai I20 Coupé WRC del equipo 2C Competition, ha sido capaz de reciclarse y hacer un gran año al volante del Ford Puma Rally1.
Con M-Sport Ford ha disputado un programa reducido de solo ocho pruebas, pero que le ha valido para dejar claro su potencial, consiguiendo liderar por primera vez un rally o marcar un mejor tiempo en un tramo dentro de la categoría máxima del WRC.
Sus resultados finales también le avalan, ya que logró terminar dos veces en el cuarto puesto de la general, en los rallyes de Cerdeña y en el Acrópolis de Grecia.
Su unión con Gilsoul supondría el regreso al mundial del copiloto belga, quien no disputa ninguna prueba del WRC desde el Rally de Monza 2020.
A Gilsoul le podría motivar el hecho de subirse a la derecha de una joven promesa que viene de una temporada donde ha disipado muchas dudas sobre su valía. Por ello, ambas partes han decidido salir a probarse este fin de semana en Francia, o en palabras del propio Loubet: "Es una oportunidad perfecta para mantener el ritmo durante la temporada baja, pero también para poder ponerme a prueba con Nicolas Gilsoul para una posible colaboración en 2023."
Veremos lo que sucede en el futuro, pero antes de la confirmación de la unión de ambos, tocará saber si veremos a Loubet con un programa completo en el WRC, aunque todo parece indicar que será uno de los tres integrantes de la alineación de M-Sport para la próxima temporada.