El Rally de Estonia y Takamoto Katsuta atraviesan una relación de lo más turbia. El japonés ha participado en tres ediciones de la prueba bática y en ninguna de ellas ha alcanzado la pancarta de meta del Power Stage. Este fin de semana, en su cuarta visita al país de Ott Tänak, ha comenzado con otra desventura más para el protegido de Toyota. Un vuelco en su cuarta pasada por el Shakedown le puso contra las cuerdas.
Los mecánicos de la formación nipona dispondrían de un tiempo muy limitado para solventar los daños del GR Yaris Rally1. La suerte acompañó con la rápida extracción del vehículo. Los organizadores detuvieron el desarrollo del tramo de entrenos y facilitaron su rescate. De igual manera, la tensión se apoderó de un Katsuta que a la hora de almorzar todavía desconocía si podría tomar la partida en la superespecial de apertura.
Afortunadamente para el cuarto clasificado del Campeonato del Mundo de Rallyes el trabajo en el parque de asistencia llegó a buen puerto. En poco más de una hora afrontará los 1.66 kilómetros de 'Visit Estonia Tartu' con su coche en perfecto estado de revista. Sin embargo, lo más difícil para el #18 empezará en el bucle matinal de la etapa de mañana, el mismo en el que tendrá que recuperar la confianza a marchas forzadas.