Desde 2021, las tripulaciones del WRC2 contaban con su propia Power Stage para los tres pilotos más rápidos, algo que para 2024 desaparecerá tras lo acordado en el Consejo Mundial de Ginebra.
Allí, los dirigentes del certamen acordaron suprimir la etapa de bonificación al considerarla "injusta", ya que en muchas ocasiones los equipos del WRC2 no cuentan con las mismas opciones respecto al orden de salida, que varía en función de los Rally1 en carrera. Como es habitual, varios Rally2 son los encargados de encabezar la cobertura televisiva de la Power Stage, lo que crea una desigualdad respecto a la superficie en que se dispute la cita. Sobre asfalto, los encargados de abrir pista se ven beneficiados de esta medida, mientras que sobre tierra estos mismos se ven perjudicados, lo que supone una desigualdad notable entre los participantes de una misma clase.
Ahora, y tras lo dispuesto en Ginebra, el WRC2 no contará con Power Stage. Además, se ha acordado que los equipos de la clase cuenten con mayor espacio en las asistencias, lo que mejorará la capacidad de trabajo y les otorgará más presencia en los Service Park.