El que fuera piloto de M-Sport en el WRC con el Fiesta R5 volverá a sentarse en el Volkswagen Polo R5 para repetir en Córcega la aventura vivida hace unos meses en el Rally RACC, prueba en la que hizo debutar en el mundial al coche alemán junto a Peter Solberg y en la que ambos pilotos mostraron un gran ritmo.
El piloto francés de 31 años de edad partirá como uno de los favoritos en su prueba de casa aunque contará con rivales de la talla de Veiby, líder del WRC2, o Bonato. A pesar de no haber participado en ninguna prueba durante 2019 se espera que el ganador del Rallye de Alemania de 2017 en el WRC2 pueda estar luchando por las posiciones delanteras desde el primer momento.
A pesar de formar parte del equipo de desarrollo que Volkswagen creo para el Polo R5, Camilli no defenderá los colores de la marca alemana en el novedoso WRC2 Pro ya que de momento la marca campeona del mundo en el WRC durante varios años no está interesada en unirse al campeonato reservado a los equipos oficiales.