La FIA publicó el pasado 14 de mayo una actualización del apéndice B del Código Deportivo Internacional (ISC) con pequeños cambios que afectan tanto a competiciones en circuitos como en rallies. En este caso, llama la atención que se establezca una sanción de 2 minutos en caso de 'mala conducta que implique abuso a oficiales'.
Esta actualización implica, en parte, tipificar lo que ya se acordó entre FIA y pilotos de rallies antes del Rally Islas Canarias: la delimitación de espacios controlados y espacios no controlados. Sería de extrañar que ocurriera un caso de palabras no muy halagüeñas precisamente en estos entornos controlados durante un fin de semana de rallies - pero, si sucediese, implicaría una sanción de 2 minutos. Una sanción deportiva, diferente del caso de Sébastien Ogier en el Rally Acrópolis del año pasado donde, por quejarse del polvo en suspensión, también tiene suspendida una multa de 30.000 € si hubiera reincidencia.
Como caso llamativo, no tipifica lo que pasaría si esas palabras vinieran de un miembro destacado del equipo. En el caso de Fórmula 1, Fórmula 2, Fórmula 3 y Fórmula E sí que se tipifica, con una sanción de 3 puestos en parrilla para la siguiente carrera para ambos coches y penalización de 5 segundos (escalable según criterio de los comisarios) si es en una carrera o sesión Sprint.
Además, en este mismo artículo se ha revisado el caso particular que le afectó a Adrien Fourmaux al final del rally de Suecia: el de palabras malsonantes en entrevistas. Ahora la multa será de 5.000 € en lugar de 10.000 € con otros 20.000 € como se impuso al francés de Hyundai Motorsport. Esta cantidad podría variar a criterio de los comisarios en base a factores: si se trata de un piloto amateur, un profesional debutante o alguien con mucho recorrido y/o que tenga un historial de buen comportamiento. También se tendría en cuenta si se contempla premeditación o hay ofensas múltiples.