Después de haber debutado la pasada campaña, Javier Blanco volverá a enfrentarse al Rally Ribeira Sacra, una de las citas más bonitas del actual campeonato gallego y que año tras presenta una competición muy disputada. Al igual que ocurría en la pasada temporada, el equipo de Ourense competirá a los mandos de su pequeño Peugeot 106, con el que esperan hacer un buen papel.
Disfrutar y terminar la carrera es el principal objetivo de un equipo que aspira a más para la próxima temporada, ya que actualmente el Peugeot 106 está casi vendido. Los patrocinadores y el presupuesto serán clave a la hora de decidir un programa de cara a la próxima temporada, que podría pasar por la disputa de alguna de las distintas copas que componen el certamen gallego.
La progresión es algo en lo que más se centrará el equipo de Blanco, pues ir mejorando en cada pasada y llegar al parque cerrado con el coche impoluto sería para ellos el mejor de los rallyes, siendo conscientes en todo momento del gran nivel que a día de hoy hay en el certamen gallego, con un buen número de pilotos que compiten en la mayoría de citas del calendario.
