No les ha condicionado la condición de favoritos a Dani Solà y David Moreno en la vigesimoquinta edición del Rallysprint de Sant Julià, en la que han arrasado al volante de un Škoda Fabia Rally2 evo. El osonense se ha llevado todos los scratch posibles para ir abriendo una diferencia que ha llegado a superar el medio minuto al completar los poco más de 30 kilómetros cronometrados que tenía la prueba, haciendo bueno el dicho de “quien tuvo, retuvo”.
Le han acompañado al podio final dos Rally2 más de la marca checa. En segunda posición finalizó el piloto local Albert Orriols, con Manel Muñoz a su derecha. El de SIMM cuenta con el récord de victorias, siete en total, pero esta vez no pudo repetir la hazaña. El tercer cajón del podio fue a parar en manos de Josep Maria Soler y Paula Manresa, muy espectaculares como siempre a los mandos de la versión R5 del Škoda.
Otro de los atractivos de la prueba era la presencia de Joan Vinyes, copilotado como es habitual por Jordi Mercader y pilotando para la ocasión su bonito Suzuki Swift S1600. El andorrano ha finalizado a las puertas del podio final, venciendo gracias a los excelentes registros del último bucle su particular duelo con el moderno Peugeot 208 Rally4 en manos de los Larrosa, Luka y su padre Oscar, que han mostrado un gran ritmo (sextos scratch) en su primera vez con el Rally4 de la marca gala.
En medio de los dos terminaron Josep Molas – Joan Codinachs, por primera vez al baket de un Škoda Fabia RS Rally2 con un buen top5. Los BMW de Torres – Noguera y Albi – Ramírez y el Porsche de Traserra – Zanini cerraron las diez primeras posiciones.