Briilar con una formación privada en el Rally Dakar resulta cada año más difícil. Las todopoderosas estructuras oficiales invierten cifras fuera de alcance en el desarrollo de sus monturas. Pero siempre hay equipos que, a base de constancia, se baten el cobre en inferioridad de condiciones. Ese es el caso de Mathieu Serradori, que, aunque no ha protagonizado su mejor inicio de carrera, mantiene sus opciones a formar parte del top 10.
Con un Century CR6 de SRT Racing, el galó completó con notable alto el bucle al oeste Riyadh: "Ha sido una etapa complicada. Nos hemos beneficiado de algunas huellas, pisándole fuerte en algunos tramos. Lo bueno es que no hemos pinchado ni una sola vez, y eso que hemos recorrido cañones, cauces secos, montañas de piedras… El lado negativo es que después del enlace me he desconcentrado un poco y he golpeado un árbol"
Tras unos primeros kilómetros de especial en los que imperó la igualdad, Serradori aprovechó la parte final de la cronometrada para destacarse: "Loïc se ha mostrado muy constante en la navegación y eso que era muy estresante: había que dedicarle tiempo a dar con el camino adecuado. En algunos lugares hemos trabajado mano a mano, y de hecho hemos abierto un importante hueco gracias a un buen golpe de navegación".