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La marcha del equipo VW ha dejado numerosas consecuencias, pero sin duda, lo peor de la decisión de la marca alemana ha sido el futuro de Andreas Mikkelsen. El piloto noruego se ha quedado sin asiento para competir en 2017 con garantías de luchar por ganar rallyes, de la misma manera que lo venía haciendo durante sus últimas temporadas dentro del equipo Volkswagen.
Andreas Mikkelsen intentó 'por activa y por pasiva' sacar a los tramos el VW Polo R WRC 2017, aunque finalmente la FIA ha decidido no homologar el modelo de la marca alemana, dejando en el aire su futuro mundialista. Tal y como el propio piloto confirma al medio Autosport, la decisión de la entidad internacional ha sentado como una bofetada en la cara al ex-piloto de VW.
"Necesito estar en un coche de 2017. Para ser honesto, soy un conductor profesional y no creo que tenga que pagar para conducir. Sería mostrar el deporte de una manera muy negativa si tuviera que hacer esto. No creo que tenga nada que demostrar a nadie. Quiero volver y luchar por el campeonato del mundo", confirmaba el propio piloto al medio Autosport.
Mientras él y su equipo trabajan para asegurar un coche de última generación para la próxima temporada, Mikkelsen no descarta volver a disputar algún que otro rallye a los mandos del Skoda Fabia R5, unidad con la que ya estuvo presente en el pasado Rallye Monte Carlo y con la que logró una destacada victoria dentro de la categoría WRC2. En 2017, Mikkelsen seguirá realizando los reconocimientos de todos los rallyes.