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El Rallye de Suecia ha tenido algunos problemas con la ‘interacción’ entre los coches históricos y los World Rally Cars, viéndose estos perjudicados en las segundas pasadas de los tramos. Para tratar de solventar esto, en la primera etapa de la edición de 2020 los históricos no saldrán a los tramos hasta que la caravana mundialista realice las dos pasadas por los tramos que discurren junto a la frontera entre Noruega y Suecia según se puede leer en la web oficial del campeonato.
Los coches históricos, muchos de ellos tracción delantera o trasera y todos con ruedas de perfil más estrecho que los World Rally Cars, siguen una línea diferente a estos. Esto lleva a que, cuando los ‘peces gordos’ empiezan su segunda pasada, se encuentran barro y aguanieve en la trazada, lo que hace la tarea de pilotar mucho más complicada y les puede afectar en términos de tiempos – y perder posiciones de cara a la segunda etapa, donde los que están más atrás son los primeros en salir, teniendo más suciedad que limpiar.
En años anteriores, algunos pilotos y copilotos han tenido quejas muy directas en contra de los coches históricos, sobre todo porque tanto su trazada como sus roderas (los trasera, si derrapan, crean un surco de mayor profundidad) afectaba a la estabilidad de los World Rally Cars yendo al límite sobre los tramos nevados. Uno de ellos fue el jefe de Toyota Gazoo Racing Tommi Mäkinen, quien propuso la idea que en 2020 se llevará a cabo. Este comentario recordaba a su vez al que realizó Julien Ingrassia, copiloto de Sébastien Ogier, en 2016 tras el Rallye de Argentina por problemas no muy distintos.
Para 2020 los coches históricos saldrán después de las dos pasadas de la caravana principal solo en la etapa del viernes. Para la segunda etapa, tomarán la posición que han tenido de manera tradicional, saliendo entre las dos pasadas de los WRC. Según palabras del director de carrera Stig Rune Kjernsli, esto igualará las condiciones de pista para los pilotos mundialistas.
De cara a esta edición la organización del rallye está preparando un itinerario del cual más de la mitad del recorrido es nuevo, ya sea utilizando diferentes configuraciones de tramos vistos años atrás o tramos nuevos. La etapa que se queda como en 2019 es la del domingo, con pasadas por los tramos de Likenas y Torsby como el Power Stage. El recorrido se compondrá de 301,26 kilómetros cronometrados.