Cambio de generación en el CERA: llegan los R5

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En esto del automovilismo, solemos relacionar las etapas con generaciones. Y es que en un mundo en el que el dinero es vital y los reglamentos condicionan muchas veces la competición, las "modas" de los vehículos son totalmente pasajeras. Después de haber extinguido a los Porsche, el vehículo que ha marcado la historia más reciente de nuestro nacional, el futuro más inmediato parece que llega cargado de R5, los vehículos de moda en medio mundo. 

Después de un 2016 de transición, en el que muchos equipos estaban más pendientes del 2017 que de otra cosa, los anuncios de los programas de cara esta temporada van cayendo poco a poco, y como era de esperar, todos los protagonistas tienen como segundo apellido la nomenclatura R5. Semanas atrás eran Iván Ares y Surhayén Pernía quienes daban a conocer su programa con el i20 R5, de la mano de la marca coreana. 

Poco después de haber festejado la llegada de dos unidades del i20 R5 a España (que llegarán muy justos de tiempo para la primera carrera), eran los hermanos Burgo quienes en pleno día de Reyes, confesaban que su futuro pasa por el Skoda Fabia R5, la unidad de la categoría que actualmente domina en muchos países, y especialmente en el mundial de rallyes, donde la marca checa es campeona. 

Con cuatro unidades ya confirmadas, las tres anteriores y la de los hermanos Vallejo, comienza el circuito de rumores y expectativas. ACSM y Burgo sueñan con traer otra unidad del Fabia R5, aunque por el momento todavía no han podido confirmar su adquisición. Además de esto, todo parece indicar que pilotos como: Manuel Mora, Miguel Fuster o incluso Luis Monzón, entre otros, podrían llevar a cabo un programa en el CERA con una de estas unidades.

En pleno festival de R5, tampoco nos podemos olvidar de los Maxi Rally, y es que además de la unidades de Suzuki y ARV, en los talleres de RMC trabajan casi sin descanso para terminar el montaje de otra media decena de unidades, alguna de las cuales podría competir en el nacional de asfalto, como por ejemplo la que pilotará Fran Cima, que será, como no podía ser de otra manera, de la marca francesa del rombo.