Después de correr dos pruebas en la atípica temporada de 2020 -terminando tercero en su último rallye en Turquía-, Sébastien Loeb no tiene planeado de momento su regreso al Campeonato del Mundo.
El francés está centrado este año en su programa con Prodrive para intentar ganar el próximo Dakar y en la primera campaña de la Extreme E, donde compite con el equipo de Lewis Hamilton haciendo dupla con la española Cristina Gutiérrez.
Pero Loeb, conocido por estar siempre buscando nuevos desafíos, la llegada de los nuevos Rally1 híbridos podría suponer un aliciente muy grande para no intentar correr en el WRC en 2022, más si cabe tras los cantos de sirena que llegaron desde M-Sport hace unos meses. Pero nada más lejos de la realidad.
"No hay ningún plan en este momento", ha comentado Loeb al medio británico Autosport al ser preguntado sobre sus opciones de vuelta al WRC el próximo año. También fue claro el francés al ser cuestionado sobre si había mantenido conversaciones con alguno de los tres equipos que disputan la categoría reina del Mundial. “No especialmente, pero siempre es agradable pilotar en el WRC. Es difícil decir que no porque la sensación que tienes en el WRC es simplemente increíble”.
El nueve veces Campeón del Mundo, que el pasado fin de semana estuvo liderando la Baja Aragón con su BRX Hunter T1 hasta que sufrió un problema técnico en los compases finales, también quiso dar su punto de vista sobre la introducción de la tecnología híbrida con los nuevos Rally1.
"Creo que es una buena forma y seguro que ellos [el WRC] tenían que hacer algo. Creo que la hibridación es lo que mejor se adapta a la disciplina, ya que los totalmente eléctricos no serían buenos. Creo que la potencia que tendrá el coche con este sistema híbrido será impresionante, así que será genial seguirlo”, ha añadido el de Haguenau.