Los beneficios que aportará a M-Sport el fichaje de Loeb

Retorna al Mundial de Rallyes el piloto más laureado de la historia. El de los nueve títulos consecutivos con Citroën. Pero los años con la firma del doble chevrón forman parte del pasado, al igual que su paso por Hyundai Motorsport. El presente sitúa a Sébastien Loeb en una formación y marca completamente nuevas para él: M-Sport Ford. El equipo de Malcolm Wilson rebosa experiencia en el campeonato. Sin embargo las limitaciones presupuestarias han golpeado notablemente a su rendimiento en la élite.

La pandemia del coronavirus acrecentó la crisis económica y de resultados de los de Cumbria. En esa situación de adversidad, Wilson templó sus nervios y se dedicó a diseñar una estrategia maestra que culminó en la mañana de este lunes con la oficialización del fichaje del galo. Las primeros indicios de este sorprendente regreso de Loeb los emitieron unos test posteriores al RallyRACC Catalunya-Costa Daurada. Un Ford Puma Rally1 recorría las carreteras mediterráneas, y en el asiento izquierdo se escondía la leyenda.

Aunque parecía que el anuncio sería inminente, transcurrían las semanas y no llegaban noticias desde M-Sport... hasta el día 21 de diciembre de 2021, fecha que perdurará eternamente en la memoria de Wilson. La táctica que empleó para hacerse con los servicios de Sébastien Ogier en 2017 volvió a triunfar, y en el 90º Rally de Monte-Carlo los propios empleados de la estructura británica y los nuevos compañeros de Loeb apreciarán unos avances que bien podrían convertirles en constantes aspirantes a las victorias.

Ya de por sí M-Sport destaca por la calidad de sus producciones. En cualquier categoría de la remodelada pirámide FIA encontraremos a alguna de sus criaturas luchando por el cajón más alto del podio. Con el cambio de reglamentación y la introducción de la tecnología híbrida, pocos se aventurarían a descartar de sus quinielas al Puma Rally1. Las diferentes versiones de los Ford Focus y Ford Fiesta WRC fueron competitivas desde sus meses en la incubadora, pero surgieron en la época de dominio de los Sébastien.

Ahora, con los dos reyes franceses con programas parciales, se abre un interesante abánico de contendientes al título, responsabilidad que en M-Sport cargará Craig Breen. Nunca habituado a soportar esta presión, la incorporación de Loeb le permitirá contar con un maestro al que le sobran conocimientos en la materia. No solamente el irlandés se beneficiará de unos preciosos consejos que también recibirán Gus Greensmith y Adrien Fourmaux, dos pilotos que todavía cubren etapas de su formación y que a buen seguro tomarán nota.

Otro de los aspectos en los que la veteranía de Loeb marcará diferencias concierne a las evoluciones a introducir en el Puma Rally1. Citroën Xsara WRC, Citroën C4 WRC y Citroën DS3 WRC son tres modelos que el nonacampeón se encargó de desarrollar y bañar en oro. No obstante, la mejor lección en la asignatura de configuración la impartió, precisamente, en el RallyRACC Catalunya-Costa Daurada del 2018, en el que transformó por completo el desastre del Citroën C3 WRC con unos sutiles ajustes en los diferenciales.

Las arcas de M-Sport agradecerán también la presencia de Loeb con vehículos de la firma del óvalo. La repercursión que alcanzará su participación en Monte-Carlo no admite ningún género de duda. Asimismo, duplica la imagen de Red Bull en las carrocerías del Puma Rally1, con el consiguiente incremento de los ingresos que ello supone. Además, su fichaje motivará que empresas se interesen porque el alsaciano les represente en la esfera internacional. En defintiva, la enésima demostración de Wilson en los despachos.