Elfyn Evans se está topando ante una temporada compleja. El británico inició el año con la vitola de favorito al título, pero llega al mes de julio sin ninguna victoria en su contador. Un cúmulo de errores e infortunios abocan al de Toyota a una situación límite en lo que a sus aspiraciones respecta. La solidez de los últimos dos años ha desaparecido por completo. El próximo fin de semana tendrá una nueva oportunidad de recuperarla.
Lo que más frustra al vigente subcampeón es el hecho de haber rodado en tiempos competitivos en los seis eventos disputados hasta la fecha. El problema de Evans es esa velocidad no consigue complementarla con unas dosis de consistencia: "Hemos tenido buenas actuaciones en los rallyes celebrados hasta ahora en momentos concretos. Tenemos que encontrarnos a gusto con el coche y en eso estamos centrados".
"Tenemos una gran posición de salida en Estonia, estamos al fondo del top seis y el objetivo es movernos hacia arriba en la clasificación y conseguir el mejor resultado posible. El de Estonia no ha sido un rally bueno para nosotros en el pasado, pero las sensaciones en el test fueron bastante buenas y espero poder traducir esto en velocidad durante la prueba", afirma un Evans que todavía persigue su primer triunfo en la era híbrida.