Más de un año y medio, desde el Rallye Cangas de Narcea de 2019 que no veíamos a Cristian García haciendo lo que mejor se le da -que sepamos-, competir en la especialidad de los tramos cronometrados. Tras mucho tiempo de sequía, por fin la semana que viene el aragonés se pondrá de nuevo el casco para disputar el Rallye Terra da Auga.
En la segunda cita de la temporada puntuable para la CERT y cuarta de la campaña del S-CER, el campeón de España de rallyes de asfalto de 2016 competirá al volante de un Ford Fiesta N5 encuadrado en la siempre competida y exigente Copa N5 RMC, siendo copilotado por Mario G. Tomé.
De este modo se confirman los planes que hemos venido comentando en los meses previos, en los que el piloto de Tarazona estaba trabajando intensamente en sacar el presupuesto necesario para correr ya este año en la copa de promoción del preparador leonés con vistas a ganar ritmo de carrera para el próximo año, donde, si la economía lo permite, intentará dar el salto a un Rally2 e la búsqueda del título del S-CER.
Pero antes de ello García se centrará en el Rallye Terra da Auga, donde volverá a sentir la adrenalina de la competición sobre una superficie, la tierra -o más bien el barro si la lluvia es fiel con la prueba gallega-, en la que tiene menos experiencia que sobre el negro alquitrán que dominó a nivel nacional hace unos años.