Fernando Dorado y Andrea Lamas lograron en este Rallye de Cáceres una décima posición con el Volkswagen Polo GTI R5 que les dejó una sensación amarga, porque la prueba del CERT se les complicó desde el principio.
“Comenzamos el día con ganas pero tras sufrir un pinchazo en el primer tramo y posteriormente un golpe en la cuna del motor y la rotura del parabrisas, decidimos bajar el ritmo en el segundo bucle de la matinal, cediendo tiempo con nuestros rivales. Por la tarde volvimos a coger algo de ritmo, marcando el sexto mejor crono en la última especial, pero ya sin posibilidad de escalar plazas en la general”, comentó.