Sin fortuna. Por segundo rallye consecutivo Ott Tänak se ha visto obligado a abandonar en la jornada del sábado cuando lideraba sólidamente. Golpe de teatro en el Rallye de Italia-Cerdeña, que ha visto como en el TC-12 -última especial de la sección matinal- el líder de la carrera con más de 40 segundos de ventaja sobre su más inmediato perseguidor.
La causa, muy parecida a la que le obligó a decir adiós en Portugal, rotura de la suspensión, en este caso tras impactar con una gran roca que el estonio se ha encontrado en medio de la pista sin poder evitarla. Lástima para un Tänak que por un motivo u otro no acaba de concretar los resultados que en cuanto a ritmo y velocidad acredita en las especiales.
Tras su salida, Sébastien Ogier ha tomado el mando en la clasificación general. El francés casi nunca falla, y tras librar la difícil jornada de ayer abriendo pista, regresa a la asistencia del mediodía en cabeza con una renta de 17.5 segundos de margen sobre el segundo clasificado, Dani Sordo.
El cántabro sigue sin encontrarse del todo cómodo en los tramos de hoy, viéndose regularmente superado por Ogier y empezando a mirar hacia atrás para que el segundo de los Toyota, el de Elfyn Evans, no le robe la cartera. A mitad de día, el galés está a 14.6 segundos del cántabro y de seguir con la progresión vista esta mañana, la segunda plaza de Sordo y Borja Rozada está en peligro.
El compañero de equipo del de Puente San Miguel, Thierry Neuville, es cuarto a 8.5 segundos de Evans y se clasifica por delante de otro Toyota, el de Takamoto Katsuta, que cierra el Top 5 absoluto.
Escabechina la que estamos viviendo en este Rallye de Italia-Cerdeña, la mejor prueba es que el sexto clasificado absoluto es el líder del WRC2, Mads Ostberg. En el WRC3, Jan Solans -a la hora de escribir estas líneas- era 2º a poco menos de 20 segundos del primero, Yohan Rossel, mientras que Pepe López es 3º uno segundos más atrás del catalán del Citroën Rally Team.