Costó poco más de dos temporadas. Su constante desarollo en la categoría reina del Campeonato de Europa de Rallyes alcanzó en el archipiélago de las Azores su punto álgido. Por fin llegó la primera victoria continental. Cuándo más difícil parecía, Efrén Llarena arruinó la fiesta al ídolo de los aficionados isleños. En un último bucle de infarto, el vigente subcampeón arrebató el triunfo a nada más y nada menos que Ricardo Moura.
La cronometrada de 'Ribeira Grande' fue el escenario del asalto decisivo entre los aspirantes al oro en la segunda ronda del curso. El de MRF Tyres no se pensó su táctica dos veces: "Atacamos muy, muy fuerte, especialmente al principio del tramo. En la última parte sabía del bucle anterior que era el más rápido, así que intenté atacar en la primera. Fuimos muy fuertes, pero sin perder la cabeza en ningún momento".
Pero no todo fue velocidad: "En algunas partes, principalmente en el bucle de la mañana, no esperábamos la lluvia, así que pusimos neumáticos duros y fue muy difícil para nosotros. Seguíamos en la pelea, hasta con ese compuesto, pero sabía perfectamente que para la última sección tendría cuatro ruedas duras completamente nuevas y Ricardo solo dos blandas, así que tuvimos mejores neumáticos para atacar en el último tramo".