El Rallye de Finlandia se caracteriza por sus rápidas pistas de tierra en las que los pilotos alcanzan puntas de más de 200 kilómetros por hora entre árboles y lagos. Esto significa que un pequeño fallo puede acabar con el vehículo ‘patas arriba’ tras haber dado unas cuantas vueltas de campana.
Y este problema ocurre temporada tras temporada, cuando algunos de los pilotos inscritos cometen pequeños o grandes fallos que acaban con sus coches de camino al desguace. Otros no llegan ni siquiera a disputar la primera especial de la prueba, y quedan fuera en los test previos como le ocurrió hace unos días a Alexey Lukyanuk.
En este reportaje os vamos a mostrar algunos de los accidentes más espectaculares ocurridos durante estas últimas temporadas, golpes que incluyen desde el de Dani Sordo en su debut en esta prueba a los mandos de un WRC en 2006, hasta el de Lorenzo Bertelli la pasada temporada.
Para comenzar nos vamos al año 2000, donde Richard Burns que venía de ser subcampeón del mundo en 1999 y que acabó repitiendo posición un año más tarde antes de proclamarse campeón del mundo, se salía a gran velocidad con su Subaru Impreza.
Otro de los golpes que será recordado por lo que supuso para él, fue el de Dani Sordo en 2006. El piloto cántabro llegaba a Finlandia tras proclamarse campeón del JWRC una temporada antes a los mandos de un Citroën C2 S1600 -con el que conseguía además la victoria en esta prueba- y quedaba fuera en el que fue su primer rallye de tierra como piloto prioritario del equipo Kronos Racing.
En 2010 la prueba acabó siendo un auténtico desguace tras los accidentes durante el primer día de pilotos como Mikko Hirvonen, Khalid Al-Qassimi o Albert Llovera. El accidente del piloto finés, que en esos momentos era líder de la prueba e intentaba darle la vuelta a un mal inicio de temporada, fue un duro revés para su moral.
Por su parte esta curva del tramo 6 fue una de las más conflictivas de esta prueba, y en ella hasta cuatro equipos se dejaban sus opciones de llegar a la meta. Al-Qassimi y Llovera lograron salir de ella sin grandes daños en sus vehículos, pero Bruschetta y Weurlander dejaron sus monturas inservibles.
Hace tan solo tres años el joven piloto Fredrick Ahlin –que disputaba la WRC Academy en aquellos momentos- sufría una de las salidas más aparatosas de este reportaje, dando numerosas vueltas de campana y destrozando su Ford Fiesta R2.
El golpe más reciente que recordamos ocurría la pasada temporada, en la que Lorenzo Bertelli –que luchaba por el título de WRC2- destrozaba su Ford Fiesta R5 y quedaba fuera de la lucha por la victoria en esta prueba.
Además de estos accidentes, han ocurrido varios más que fueron llamativos en su día como los de Malcolm Wilson en la temporada 1993 y los de los Peugeot oficiales hace no muchos años, como se puede comprobar en este vídeo resumen de WRC.com.
Esperamos que esta temporada los pilotos anden con más ‘tiento’ y tengan la suerte de su parte y no nos generen más imágenes como las de este reportaje.