Cifras y curiosidades del campeonato gallego de rallyes 2019

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Desde A Coruña y hasta la Mariña Lucense, tocando las cuatro provincias, el regional gallego ha vuelto a ser el referente dentro de la península y no solo por la cantidad y calidad de inscritos, sino que también por el amplio abanico de pretendientes a las victorias que perseguían el éxito en cada una de las citas puntuables.

Con Víctor Senra, Iago Caamaño y Alberto Meira como principales espadas, el certamen se inició en a A Coruña sin ninguno de los tres en lo más alto, pues fue Iván Ares –invitado de excepción- el que conseguía llevarse el gato al agua y ser el primer líder del año. En esta primera cita, Senra fue el único capaz de robarle algún scratch al piloto de Carral.

Sin la oposición de Ares, la temporada nos dejó a un claro dominador: Víctor Senra. El de Dumbría conseguía sumar cinco triunfos, certificando el título a falta de dos carreras para completar el calendario. Como no, el piloto del Citroën C3 R5 fue el que más scratch logró cosechar a lo largo del año; un total de 27, que corresponden a poco más del 30% de todos los disputados.

Además de Senra y Ares, Iago Caamaño con dos y Meira con uno, fueron los cuatro pilotos capaces de subir a lo más alto en alguna de las nueve citas disputadas. En el caso de Caamaño, el coruñés fue el único de los cuatro que lograba hacerlo con dos monturas distintas: Ford Fiesta R5 en Narón y VW Polo GTi R5 en el Mariña Lucense.

Ocho nombres han sido los que, al menos en una ocasión, han sido la referencia en alguno de los ochenta y cinco tramos disputados a lo largo del año. Después del ya citado Víctor Senra, le siguen en esta peculiar clasificación; Alberto Meira (25), Iago Caamaño (15), Iván Ares (6), Ricardo Costa (5), Adrián Díaz (2) y Manuel Fernández y Óscar Palacio con solo un tanto anotado.

De los tres de cabeza, Alberto Meira fue el que más tardó en lograr su primer scratch con el DS3 R5, pues no lo lograría hasta el Rías Baixas. Por la contra, Caamaño estrenó su casillero en Noia y Senra ya lo inauguró en la cita inicial. Además, Adrián Díaz fue el único piloto que conseguía sumar scratch sin conducir una montura R5, pues lo hizo con el Micra N5 de RMC en el San Froilán.

Además, la temporada gallega nos dejó los siguientes datos y curiosidades:

• Los 85 tramos que dieron vida al certamen sumaron un total de 839,95 kilómetros.
• El campeonato tuvo casi 129 inscritos de media por rallye, siendo Noia y el Rías Baixas los que mayor afluencia de deportistas pudieron lucir en sus listados.
• El 97,64% de los scratch fueron anotados por coches de la categoría R5, mientras que el 94,11% lo hicieron pilotos de nacionalidad española.
• Los dos duelos más apretados del año los protagonizaron Caamaño y Meira (Narón y Mariña Lucense) decantándose la balanza a favor del coruñés en ambos por 7,3 y 6,1 seg. respectivamente.
• Óscar Veiga fue el único piloto capaz de subir al podio final sin competir con una montura de las categorías R5 o N5. Lo hizo en el Mariña Lucense, con su Subaru Impreza.
• Citroën fue la única marca que logró meter un coche en el podio final de todas las pruebas, siendo también la única privilegiada en marcarse un triplete. Sucedía en el Rías Baixas con Senra, Costa y Meira como protagonistas.
• La Escudería Ya-Car fue la que más veces visitó el podio: 7. Solo una más que la Lalín-Deza.
• El copiloto David Vázquez necesitó competir con dos pilotos para certificar su título absoluto de navegante. Los afortunados fueron Víctor Senra y David Rivas.