Cuando Volkswagen lanzó el Tiguan, los SUV compactos empezaban a vivir su auge y no le fue difícil hacerse con un buen puesto en el mercado. Acostumbrados a los sutiles cambios generacionales de la marca, a nadie le habría extrañado que esta segunda generación hubiese evolucionado mínimamente, pero las cosas han cambiado en pocos años y Volkswagen no se ha quedado atrás.
Actualmente la competencia en el segmento es brutal y esta segunda generación del Tiguan ha puesto sus miras más alto. Con su nueva plataforma MQB se ha hecho más grande ganando longitud (4,49 m), anchura (1,84 m) y reduciendo altura (1,63 m) y peso (- 50 kg), logrando unas proporciones más equilibradas y deportivas. Perfectas para ese estilo de trazos rectos y serios que lucen ahora sus parientes y que lo posicionan más cerca de los productos premium.
Además de para mejorar su imagen, el aumento de las cotas exteriores ha servido también para mejorar la habitabilidad, algo especialmente notable en el maletero: ahora ofrece un volumen de carga de 615 litros, 145 más que antes.
Y si ha ganado por fuera, no digamos nada por dentro. Su habitáculo posee un salpicadero más de turismo y menos de SUV, tanto por la ergonomía y distribución de los mandos, como por la calidad de sus materiales. Las diferentes pantallas táctiles disponibles para la consola (compatibles con Android e iOS) y la posibilidad de contar con un cuadro totalmente digital y Head-up Display, lo colocan a la última.
Como siempre las opciones a la hora de motorizarlo serán muy amplias, pudiendo combinar sus ocho motores TDI (115 CV, 150 CV, 190 CV y 240 CV) y TSI (125 CV, 150 CV, 180 CV y 220 CV) con diferentes cajas de cambio (manual o automática DSG) y sistemas de tracción (delantera o total 4Motion).
Sin olvidar la versión híbrida enchufable, que de momento se ha presentado a través del Tiguan GTE Concept. Gracias a un propulsor de 218 CV formado por un motor 1.4 TSI y otro eléctrico, es capaz de recorrer 50 km en modo eléctrico, acelerar de 0 a 100 km/h en 8,1 segundos y alcanzar los 200 km/h de punta. Aunque su mayor novedad está en el techo, donde incorpora unos paneles solares que son capaces de, en países como España, extraer energía para circular gratis unos 1.000 km al año.
En cuanto a equipamiento, tiene casi de todo. De serie ya incorpora elementos como frenado de emergencia en ciudad y mantenimiento automático de carril, mientras que opcionalmente se podrán sumar programador de velocidad activo, climatizador trizona, apertura y arranque sin llave, portón con sistema de apertura ‘manos libres’, llantas de hasta 20 pulgadas…
Si el Tiguan ya era una opción muy a valorar a la hora de hacerse con un SUV compacto, ahora lo es más que nunca.