Desde el Tokyo Auto Salón nos llega este pequeño y deportivo ser, realizado por el preparador GRMN (Gazoo Racing tuned by MN) sobre la base de un Toyota iQ. Puesto que esta no es la primera vez que los caminos del preparador y del más pequeño de la familia Toyota se cruzan (el año pasado ya presentaron en este mismo Salón el iQ Supercharged a modo de concept), el resultado no es un simple coche de Salón, sino la presentación de una versión que saldrá a la venta en unos meses.
Si el primer iQ Supercharged se presentó con 119 CV y 158 Nm de par extraídos del motor VVT de 1.33 litros, ahora el Supercharged II aumenta ligeramente su rendimiento hasta llegar a los 130 CV y 180 Nm. Una potencia respetable para los 990 Kg de peso del Toyota y sus reducidas dimensiones.
Para mejorar aun más su respuesta en los entornos naturales de este coche (que no son precisamente las autopistas), las relaciones de la caja de cambios de seis velocidades se han acortado. También se han redimensionado los frenos, recalibrado las suspensiones y acoplado un nuevo sistema de escape.
El kit de carrocería de este iQ tampoco se queda corto y ‘enfada’ sustancialmente la imagen del urbanita. Los faldones se agrandan e incorporan unas amplias aperturas verticales, además de un enorme difusor trasero. Siguiendo la línea marcada por estos, las aletas también crecen y dejan sitio a las nuevas llantas Enkei de 16 pulgadas. Y terminando de sumarse a la fiesta están las taloneras, el alerón y los faros oscurecidos.
GRMN fabricará 100 unidades de este modelo para quien busque un iQ especial, y no quiera irse a un Aston Martin Cygnet. De hecho este Supercharged II es más razonable que el Aston.
Sígueme en: @AntonioDomingz
