El Grupo Volkswagen quiere coches cada vez más y más rentables, a pesar de que a veces eso implique clonar descaradamente modelos en diferentes marcas, que se supone tienen diferentes personalidades. Ha sido el caso por ejemplo de los Seat Mii, VW Up! y Skoda Citigo, coches en los que casi es necesario mirar a su escudo para diferenciarlos.
Seat, supuestamente la marca deportiva del trío, va a empezar a marcar las diferencias con el Mii FR-Line que se va a llevar al Wörthersee estos días. Y es que después de que las siglas FR hayan llegado incluso al Ibiza ST con 105 CV, ya no hay de que extrañarse si aparecen también en el pequeño Mii.
Porque que nadie piense que este coche es un rabioso urbano de los que te ponían los pelos de punta, pues su aspecto no se corresponde con su motor. Seat ha conservado los mismos tricilíndricos del resto de la gama con 60 y 75 CV. Muestra clara de que FR se convertirá en un simple acabado, como los R-Line de VW o S-Line de Audi (de ahí la nueva denominación FR-Line).
De todas formas no seré yo quien critique este coche, pues con cuatro retoques bien hechos Seat ha conseguido que el tremendamente soso y desangelado Mii, se convierta en un urbanita atractivo y juvenil. Razón suficiente para que el Mii FR-Line acabe llegando a los concesionarios en no mucho tiempo.
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