Justo hace 40 años salía al mercado la Volkswagen T3 Syncro, la variante de tracción a las cuatro ruedas de la T3 que se había presentado con tracción trasera (recordemos que la famosa furgoneta de Volkswagen nace a partir de la base técnica del Escarabajo original) en 1979. Ya desde el principio se pensó en el espacio para un árbol de transmisión y un diferencial para enviar la potencia al eje delantero, pero hubo que esperar seis años antes de verlo en el mercado junto a la Caravelle Syncro. Para sacar estos coches al mercado, Volkswagen inició una relación con Steyr-Daimler-Puch, siendo estos especialistas en este tipo de modificaciones - algo similar a lo que vemos a día de hoy con vehículos modificados para camperizaciones (Fuente: Cars & Pizza).
Otra ventaja del embrague Visco era el hecho de que se podía prescindir del diferencial central, que normalmente compensaba las diferencias de velocidad entre los ejes delantero y trasero (y que hemos visto en años anteriores en el Mundial de Rallyes, tanto diferencial mecánico como electrónico). Esta tarea también la realizaba ahora el embrague lleno de aceite de silicona. Un protector de bajos de varias piezas protegía la tecnología de tracción total de los daños durante las aventuras todoterreno. También se utilizaron muelles diferentes y amortiguadores más duros. Como resultado, la carrocería de los modelos Syncro era 60 milímetros más alta en comparación con los modelos normales.
A la hora de elegir una caja de cambios, los ingenieros de Volkswagen optaron por una caja de cambios 4+G, que tenía cuatro marchas de avance clásicas y una reductora para conducir fuera de la carretera. También se ofrecían como opciones bloqueos de diferencial en los ejes delantero y trasero, así como un paquete para terrenos difíciles. Este último incluía características como ejes de transmisión reforzados, un amortiguador de vibraciones en la transmisión y varios refuerzos en la carrocería. Con este equipamiento, los modelos Syncro impresionaban con una distancia al suelo de 215 milímetros en la parte delantera, un ángulo de rampa de 22 grados y un ángulo de ataque de 24 grados. En términos de tecnología de conducción, la furgoneta VW había alcanzado el nivel de un vehículo todoterreno, pero con mucho más espacio y comodidad a bordo para las grandes aventuras de la vida.
De 1987 en adelante, la Volkswagen T3 Syncro estuvo disponible con ruedas de 16 pulgadas, además de importantes modificaciones en el chasis y la carrocería, frenos más grandes y un bloqueo del eje trasero de serie, para un mejor rendimiento en terrenos extremos. Los refuerzos estructurales aumentaron la carga útil todoterreno hasta una tonelada, mientras que la distancia al suelo creció hasta los 246 mm (+25 mm). De los 45.478 T3 Syncro fabricados, solo 2.138 unidades contaban con estas especificaciones todoterreno reforzadas y salieron de las líneas de producción de Graz hasta 1992, convirtiéndose en vehículos de referencia para aventureros, trotamundos, trabajadores forestales y comerciantes.
Más exclusiva aún fue la versión de camión plataforma con una zona de carga descubierta, de la que apenas se produjeron unas 60 unidades con especificaciones de expedición. Sin embargo, el coste adicional de la transmisión Syncro y la conversión a ruedas de 16 pulgadas suponía un incremento de aproximadamente un 50 % respecto a la versión de tracción trasera con carrocería de plataforma.