Tras los seis tramos del sábado, Andrea Crugnola era el gran dominador en cada tramo, pero el liderato en la clasificación general era para Giandomenico Basso al aprovechar un pinchazo de su rival directo. La jornada daba comienzo con un scratch de Simone Campedelli, siendo mejor que Crugnola en tan solo nueve décimas.
Pese a la gran distancia a la que estaba Crugnola del liderato, los scratch seguían sumándose a su cuenta particular ya que consiguió tres seguidos antes de la parada en el parque de asistencia. Lukyanuk era penalizado con un minuto de tiempo y perdía prácticamente todas las posibilidades de victoria y con solo doce segundos de ventaja sobre Crugnola.
Tras la vuelta a la acción, Crugnola no iba a permitir que nadie la arrebatase ni tan siquiera un solo scratch ya que consiguió liderar los cuatro últimos tramos de la prueba antes de los dos especiales. Estos resultados le permitieron acercarse a tan solo un segundo de Lukyanuk para entrar dentro del podio de la prueba del certamen europeo, por lo que los tramos especiales de 1,1 kilómetros serían determinantes para la clasificación.
El tramo decimoquinto no solucionó nada, de hecho, igualó aún más la contienda. La diferencia entre Crugnola y Lukyanuk era de un segundo en el tramo, por lo que tenían el mismo tiempo en la clasificación. El último tramo decidiría quién ocuparía el último escalón del podio, mientras que Basso ya tenía más que asegurada la victoria.
El scratch en el último tramo fue para Crugnola, por lo que arrebataba la tercera plaza a Lukyanuk y demostraba que, si no hubiese sufrido el pinchazo, sería el ganador de la prueba.