Los cuatro tramos del domingo serían fundamentales para conocer el desenlace del mano a mano entre Sébastien Ogier y Esapekka Lappi. Sorprendentemente, Ott Tänak marcaría el mejor tiempo en el primer tramo del día para maquillar una actuación muy discreta en Turquía durante todo el fin de semana. Mikkelsen y Latvala completaban los tres mejores tiempos, mientras que Ogier ampliaba la ventaja en 5 segundos con respecto a su compañero en Citroën.
Dani Sordo tenía prácticamente asegurado acabar en el TOP 5 de la prueba al conseguir el tercer mejor tiempo en el antepenúltimo tramo de la prueba y sacar más 40 segundos a Latvala en la general. La igualdad entre Ogier y Lappi era total, hasta el punto de que ambos marcaron el mismo tiempo en el tramo. El scratch sería para Latvala, el piloto finlandés no terminaba de encontrar regularidad e intercalaba buenos tramos con algunos más discretos.
El buen fin de semana de Andres Mikkelsen se confirmaba con el scratch en el penúltimo tramo, acabando por delante de Latvala y Dani Sordo. Ogier afrontaría la Power Stage con una ventaja de 19,9 segundos sobre Lappi, una distancia suficiente como para alcanzar la victoria en un tramo de 7,05 kilómetros.
La Power Stage sería para Ott Tänak, seguido de Thierry Neuville y Sébastien Ogier. El piloto francés de Citroën volvía a conseguir una victoria que se le había resistido desde el Rally de México. Al podio se subirían Sébastien Ogier, Esapekka Lappi y Andreas Mikkelsen, acabando Dani Sordo en una positiva quinta plaza.