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M-Sport ha comenzado el jueves 16 de mayo los test previos al Rallye de Portugal, próxima prueba puntuable para el Campeonato Mundial de Rallyes. Hasta la zona portuguesa de Felgueiras se ha desplazado la estructura británica, sentándose Teemu Suninen a los mandos del Ford Fiesta WRC.
La escudería británica se encuentra en cuarta posición dentro del mundial de constructores a una diferencia considerable de la cabeza que ostenta Hyundai Motorsport. No obstante, sus resultados han sido cada vez más competitivos, con Elfyn Evans logrando dos podios (uno de ellos fue en Córcega, donde estuvo liderando hasta un pinchazo en el último tramo) y un Suninen que tras un inicio con muchos contratiempos está siendo cada vez más acertado al volante.
Portugal es un lugar donde los hombres dirigidos por Malcolm Wilson y su director deportivo Richard Millener pueden realizar un gran papel. No en vano lo hicieron en la pasada
edición de la prueba, con Evans subiéndose al segundo puesto y Suninen al tercero, solo superados por Thierry Neuville. Los dos consiguieron un gran resultado para M-Sport en una prueba donde su entonces jefe de filas, Sébastien Ogier, tuvo un rallye infructuoso.
Se produce ahora una situación particular en la cual los equipos mundialistas están preparando dos eventos al mismo tiempo, ya que mientras M-Sport ha viajado hasta Portugal en Hyundai preparan ya el Rallye de Cerdeña, unos test que arrancaron con Dani Sordo y Carlos del Barrio a los mandos del Hyundai i20 Coupé WRC. Portugal y Cerdeña son dos rallyes en los que los equipos han de utilizar los mismos chasis y algunos componentes en ambas pruebas, una situación similar a la que se dio en Argentina y Chile con el objetivo de ahorrar costes logísticos.