El ex campeón mundial de rallyes Marcus Grönholm está negociando con Hyundai para traer la marca al Campeonato Mundial de Rallycross, como ya se intuyó el pasado mes de octubre. El finés, propietario del equipo GRX, pretende empezar como equipo privado con el objetivo de atraer apoyo de la marca surcoreana de cara a próximas temporadas.
La idea es adaptar para el rallycross dos unidades del Hyundai i20 WRC (el modelo de 2016), de manera similar a lo que hizo PSRX Volkswagen Suecia con el Volkswagen Polo R WRC. Uno de los coches estaría conducido por el hijo de Marcus Grönholm, que debutó en el WRX con Olsbergs MSE y este año corre con un Ford Fiesta, quedando otro posible asiento disponible – para el año que viene quedan pilotos libres, siendo una buena opción la de Andreas Bakkerud.
“Lo hemos hablado con ellos pero la decisión final se tomará dentro de poco tiempo. Espero que todo venga de la mano, aún no estamos del todo listos y el tiempo pasa rápido, ya estamos terminando el mes de noviembre. Esperamos tener algo de apoyo. De momento no sería equipo de fábrica. Un equipo de dos coches estaría bien, estamos trabajando en ello”, declaró Grönholm según Motorsport.com.