Cautela y nervios de acero son las armas definitivas para afrontar la primera etapa de un Dakar. Tras los eternos preparativos de los días previos hoy arrancaba la competición con una larga etapa de 752 km de las de verdad. Nada de paños calientes, ha sido una primera especial donde todos los pilotos se encontraron ya con dificultades reales sin tiempo de adaptación.
A las 07:46h de la mañana salía la dupla Farrés/Monleón en dirección a la primera de las dos especiales del día (de 86 y 213 km respectivamente), separadas por un pequeño tramo neutralizado por carretera de 19 km. Una primera sección de cañones y ríos secos con muchísima piedra daba paso a las primeras dunas, ya complicadas al ser muy blandas. En la segunda parte las pistas rápidas eran la tónica, con la dificultad añadida de las múltiples posibilidades a elegir debido a la diversidad de huellas que encontraban. Pese a todo, ha sido una etapa del gusto de todos.
Gerard y Armand, este último en su primera participación en Side by Side tras dejar la moto, han salido a la pista con unos tiempos discretos en los primeros puntos de paso del día. La causa fue un primer pinchazo en el km 10 en donde además detectaron una pequeña pérdida de aire en la segunda rueda de recambio, por lo que decidieron reducir drásticamente su ritmo para poder alcanzar la meta y no arriesgar. Ya con más confianza y seguridad, a partir de la segunda especial han ido recuperando posiciones para finalizar en una cómoda 8ª plaza final sin asumir riesgos, fieles a la estrategia de Farrés. En un día en el que ya han pasado muchísimas cosas era necesario ir con cautela.
Gerard comenta así la etapa nada más llegar al bivouac de Al Wajh: “Teníamos claro que era una etapa para no correr mucho, una etapa de inicio para no asumir riesgos pero tampoco para ir muy despacio. Hemos intentado ir con mucha cabeza y nada más empezar hemos detectado que el reglaje de la estabilizadora no estaba fino, por lo que las trazadas no eran limpias y pinchamos. A partir de ahí hemos decidido conservar al máximo por temor a quedarnos sin ruedas y no poder llegar. Fue una decisión difícil pero son las que hemos de tomar para seguir en carrera. Estamos muy contentos de estar aquí y de haber empezado, sobre todo por la segunda mitad de especial que hemos hecho, ha ido muy bien.”
Armand Monleón, por su parte, también estaba muy satisfecho con el día: “Hemos rodado clavando el roadbook, sabemos que la navegación será la clave para estar delante. Hoy hemos seguido nuestro instinto y no hemos cometido fallos, las notas de hoy ya han sido complicadas y hemos rodado con cuidado, sobre todo en una zona de río donde era fácil pinchar. En cuanto al Can-Am, es un vehículo increíble, afinaremos el tema de suspensiones y empezaremos a dar guerra.”