La undécima etapa del Dakar prometía ser la etapa definitiva, la que marcara diferencias. Las predicciones no se cumplieron y vivimos, tanto en motos como en coches una etapa más bien tranquila, a pesar de los más de 600 kilómetros de tramo cronometrado por un mar de dunas seguido por caminos con mucho fesh-fesh.
Dentro de la categoría T2, se acaban los adjetivos para el trabajo del equipo Toyota Autobody, donde sus pilotos volvieron a dar un recital impropio de los coches de esta categoría, finalizando la etapa en 23º y 24º posición respectivamente, a cerca de dos horas del ganador mientras que Foj hacía lo propio en la posición 34º, parando el crono a las 8:53’06’’, a 2:55’06’’ de Orlando Terranova, ganador del día.
Y pese a lo aparente, no fue un día fácil para los T2, que debido a su escasa potencia sufren en exceso en las dunas. Buena muestra de ello ha podido dar Alejandro Yacopini, que vio como sus opciones de podio se desvanecían tras pasar por meta con un tiempo dos horas mayor que el de Xavi Foj. En la general, la victoria en T2 para Xavi se podría dar únicamente bajo un abandono del equipo Toyota Autobody, pues Mistsuahshi y Gibon aventajan al español en casi 11 horas. La tercera plaza queda afianzada pues son casi 5 las horas a las que se encuentra Yacopini. A estas alturas de la competición, solo ocho vehículos resisten en la categoría.
Xavi Foj: Las características cambiantes del terreno nos ha obligado a llevar durante muchos kilómetros media presión en los neumáticos, que han aguantado perfectamente sin ningún pinchazo durante los 600 kilómetros.
