Ford ha presentado en el Salón de Ginebra un renovado Focus con una serie de cambios estéticos, de equipamiento y de eficiencia, que han puesto al día al exitoso compacto. El restyling ha afectado a toda la gama excepto a las versiones ST, que sufrirán el suyo propio y vendrán acompañadas de alguna sorpresa.
La estética de los ST era diferente al resto y lo seguirá siendo con faldones y llantas específicas, aunque del restyling general que ha sufrido el Focus tomarán elementos como los grupos ópticos y el portón.
Pero más allá de los cambios visuales, lo realmente novedoso en los ST estará bajo el capó. Según ha podido saber Autocar en el Salón de Ginebra, Ford está preparando un ST con motor diesel, mucho menos potente que la versión de gasolina pero con un planteamiento igual de deportivo.
Mientras que el gasolina verá revisada su potencia y eficiencia, para ofrecer algo más que los 250 CV actuales con un menor consumo, el diesel tendrá que conformarse con unos 185 CV. Es una diferencia importante, pero será suficiente para rivalizar con los Golf GTD y León FR TDI de 184 CV.
Con esa mecánica de gasóleo el Focus ST no tendrá tanta garra, pero se abrirá a un abanico de clientes mucho más amplio. Por no decir que a la versión familiar le irá como anillo al dedo.