Toyota quiere a Subaru y Mitsubishi de vuelta al WRC

Twitter (@TheDDuran)

El presidente de Toyota, Akio Toyoda, ha asegurado que le gustaría que su equipo compitiese con otras marcas niponas en el Campeonato Mundial de Rallyes en el futuro, en concreto Mitsubishi y Subaru. Toyoda considera que la cada vez más probable vuelta del Rallye de Japón (que tendrá evento de preinspección en noviembre) podría animar aún más a estas u otras marcas del país del sol naciente.

Toyota, Mitsubishi y Subaru compitieron juntos en los años noventa, en el máximo apogeo de los coches del Grupo A y la llegada de la primera generación de los World Rally Car. Subaru, con el equipo Prodrive, logró el título de constructores en 1995, 1996 y 1997 mientras que Mitsubishi arrasó en el campeonato de pilotos entre 1996 y 1999 con cuatro títulos para Tommi Mäkinen, ahora responsable de Toyota Gazoo Racing en el WRC. Por su parte, Toyota logró su último título de pilotos en 1994 con Didier Auriol en el Celica ST185 y el último campeonato de constructores en 1999, con el Corolla WRC pilotado por Auriol y Carlos Sainz.

A finales de 1999 Toyota decidió abandonar tanto el programa en el WRC como el de Le Mans (donde corrían con el Toyota GT-One y estuvieron cerca de llevarse la mítica carrera en 1998 y 1999) para centrarse en la Fórmula 1, donde permanecieron hasta 2009. Mitsubishi terminó su andanza en los rallyes en 2006 mientras que Subaru hizo lo propio a finales de la temporada 2008. Desde entonces se han visto coches de rallyes japoneses de categorías inferiores, como los Lancer Evolution X R4, los Subaru Impreza WRX STi R4 o el Suzuki Swift S1600, otro coche de una marca japonesa que también cerró su programa en el WRC durante la pasada década.

“Toyota es la única (marca japonesa) participando en el WRC, antes teníamos con nosotros a Mitsubishi y Subaru. El reto de Toyota está animando a todos los fans. Muchos fans recuerdan a Toyota, Subaru y Mitsubishi y espero que con la llegada del WRC a Japón no sólo estimule a Toyota sino a todos los fabricantes – nos gustaría verlos de vuelta”, declaró Toyoda según recoge el medio Motorsport.

“Quiero apoyar esto, de esto trata Gazoo Racing – no sólo pensamos en Toyota, trabajamos por el bien del deporte. Espero que Toyota se quede en los rallyes mucho tiempo. A veces Toyota depende de motivos económicos pero para mí el objetivo es participar en rallyes para hacer coches cada vez mejores – ese es el único objetivo que tenemos. Las carreteras hacen los coches y en el WRC es muy, muy duro”, añadió el presidente a nivel global de Toyota.

El mayor inconveniente para la vuelta de Mitsubishi y Subaru no solo es la falta de intereses, sino también el modelo propicio para ello. El caso de la marca de los tres diamantes es quizás el más complicado teniendo en cuenta que ahora forma parte de la conocida como Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi y dependen de la cúpula situada en París para cualquier programa.

El único modelo del Segmento B que tiene la marca en estos momentos es el Space Star (Mirage en otros países), un coche modesto en todos los sentidos que es heredero del Colt de principios de siglo (el Colt llegó a correr en rallyes, pero en categorías inferiores). En 2014 el preparador sueco MPart fabricó su propio Mitsubishi Mirage R5, pero Mitsubishi no le dio el respaldo necesario para homologarlo ante la FIA y convertirlo en un R5 con el que competir en pruebas internacionales – si puede correr en campeonatos donde lo permita la federación correspondiente como ocurre en Suecia, Gran Bretaña o Chile.

Al igual que ocurre con Mitsubishi, Subaru también se ha centrado en los últimos años en la fabricación de modelos todoterreno, mientras que el Impreza ha perdido casi todo su carácter deportivo y el WRX STi (el modelo tope de gama de la marca en la actualidad) se sale del segmento B en el que se basan todos los World Rally Cars actuales. También cuentan con el Subaru BRZ, casi idéntico al Toyota GT86 del que se construyó años atrás una variante de rallyes, el GT85 CS-R3.