La segunda cita del fin de semana dentro del Drive Dmack Fiesta Trophy está siendo tan entretenida o más como la primera. Si sobre la tierra catalana Marius Aasen se mostró muy rápido, hoy sobre el asfalto sigue mostrándose intratable.
El noruego -que partía como claro aspirante al título antes de la cita de ayer, y que lo refundó con su victoria- salía hoy a por todas y desde el primer tramo se situaba en cabeza. En la segunda especial unos de sus dos rivales por el campeonato, Cave, perdía once segundos con él que ya le serían insalvables durante el resto de la jornada.
Pese a que el británico conseguía reducir la ventaja hasta los 3,7 segundos, en la penúltima especial Aasen apretaba de nuevo y llevaba su renta hasta los 7,5 segundos con los que finalizó esta primera jornada de asfalto.
Por detrás, Brendan Reeves se mostró muy rápido en asfalto y acabo la jornada en tercera plaza, y Max Vatanen volvió a sufrir problemas que le dejan muy retrasado en la clasificación y sin prácticamente opciones de título.