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Pepe López y Borja Rozada han debutado en el Rallye de Monte-Carlo, a los mandos del Peugeot 208 R5 T16 del equipo Teo Martín Motorsport. Tras una jornada complicada, el equipo madrileño ha hecho el décimo tercer puesto de su categoría WRC2.
La primera cita del calendario mundialista ha comenzado con una mala noticia: un accidente de Hayden Paddon en la primera especial ha concluido en el fallecimiento de un espectador que se encontraba en la curva por donde ha chocado el Hyundai i20. Tras este hecho, la primera del Monte-Carlo quedó totalmente neutralizada ocasionando que López y Rozada no pudieran salir a pista.
El equipo cogió el relevo, en la segunda especial (SS2), en la que ocuparon el décimo tercer puesto tras un pinchazo en la rueda derecha trasera del 208, a pesar del buen inicio con el que se marcaban un quinto mejor tiempo en el primer parcial. En su debut, Pepe ha asegurado que se trata de una cita "complicada" donde el hielo ha estado presente y ha subido la dificultad de la prueba deportiva.
"Una pena" es cómo ha definido el piloto, para Scratch, lo ocurrido, pero sobre todo ha afirmado que "todavía queda mucho rallye" y que han aterrizado en Gap, Francia, "para aprender". Declaraciones del propio piloto en su asistencia tras llegar del SS2, que debido a un 'elevado' ruido durante la entrevista, en la carpa del equipo de Calm Competició que tan buen trabajo está haciendo, no hemos podido subir en formato audiovisual.
La previsión de mañana es de nieve y hielo como protagonistas de las carreteras francesas. Sobre este hecho, López-Rozada esperarán obtener un mejor resultado y demostrar la rapidez que han conseguido al inicio del segundo tramo cronometrado del Rallye de Monte-Carlo.