Sébastien Ogier y Citroën Racing vuelven a estar unidos para las próximas temporadas en el Campeonato Mundial de Rallyes. El piloto francés ha firmado un acuerdo con el que dejará de correr con M-Sport para regresar a la marca de los dos chevrones, la misma con la que ascendió hasta la categoría máxima después de haber sido campeón mundial junior la pasada década.
Tiempo atrás esta relación era impensable puesto que Ogier dejó Citroën debido a las tensiones internas en el equipo cuando aún estaba al mando Sébastien Loeb – fue entonces cuando tomó la acertada decisión de apostar por el proyecto de Volkswagen Motorsport, que le convirtió en el campeón mundial que es hoy día. En más de una ocasión el equipo galo ha tratado de recuperarle, pero sin éxito: los dos últimos años ha disfrutado del ambiente de M-Sport, que le suponía la ventaja de no tener que comprometerse a eventos de marca como ocurre con equipos oficiales.
El pentacampeón mundial será la gran baza de los de Versalles para volver a ganar el título de pilotos y el de marcas, algo que no hacen desde el final de la era Loeb. Desde que se retirase el alsaciano, solo han vencido con máquinas de Citroën Dani Sordo y Kris Meeke, quien fue eliminado del equipo tras su accidente en el Rallye de Portugal el pasado mes de mayo.
La falta de liderazgo se ha vuelto evidente en los últimos años, notándose sobre todo en las carreras en las que ha estado Loeb este año: en México y en Córcega Citroën Racing parecía rejuvenecido de repente, peleando por la victoria incluso con un Loeb que apenas ha corrido en la generación actual de World Rally Cars y que lleva cinco años sin correr a tiempo completo.
Otra de las fichas que tenía en mente Citroën semanas atrás era la de hacerse con los servicios del propio Sordo, quien también se curtió en el equipo junto a Loeb en la pasada década (de hecho, buena parte del plantel actual del WRC ha pasado por Citroën ya que era la marca que gestionaba el JWRC). No obstante, muchos indicios apuntan a que Sordo continuará en Hyundai Motorsport, teniendo como posible fichaje a Esapekka Lappi, proveniente de Toyota.
Si Ogier cumple sus palabras, este contrato será el último que lleve a cabo antes de retirarse del máximo nivel, dado que considera que se está acercando al final de su carrera en el WRC. Si esto es así, cabe la posibilidad de que contemple participar en otras disciplinas deportivas, habiendo disputado carreras de circuitos con anterioridad (sin ir más lejos el pasado fin de semana estuvo en la carrera del DTM en Red Bull Ring invitado por el equipo Mercedes).