El Rallye de Argentina será la tercera prueba que disputen Nil Solans y Miki Ibáñez en el Campeonato Mundial de Rallyes dentro de la categoría WRC2 (han hecho cuatro, pero en Suecia salían fuera de WRC2). El objetivo que tiene la dupla española es la de traer a casa la mayor cantidad de puntos posible después de los infortunios que han sufrido en pruebas anteriores, todas ellas por problemas surgidos de repente en su Ford Fiesta R5.
Las altas temperaturas y altitudes del Rallye de México no le dieron el mejor de los inicios al de Matadepera, pues en el primer tramo del viernes se quedó parado y de ahí en adelante no tuvo posibilidad real de pelear por las posiciones de delante (de hecho, volvió a verse obligado a abandonar por causas mecánicas en la etapa del sábado). En Córcega la situación no mejoró, logrando por segundo rallye consecutivo un séptimo puesto en la categoría.
De manera similar a México, Solans e Ibáñez salen a un rallye en el que no han estado antes, aunque su experiencia previa en tierra les será de ayuda ya que el tipo de tierra es similar al de España (más parecido en comparación con los tramos de México, el último rallye de tierra que han hecho hasta ahora). En la categoría WRC2 partirán nueve competidores, siendo los rivales a batir los hombres de Skoda, Pontus Tidemand (vigente campeón mundial de la categoría) y Kalle Rovanperä.
“Los tramos se ven bonitos y rápidos, una arena bastante suelta. Veremos cómo que nos da, pero esperamos romper esta racha de mala suerte que llevamos desde principio de temporada. Estamos aquí para romper este maleficio. En términos de prestaciones ha sido un buen comienzo, pero estos abandonos nos han limitado mucho a la hora de coger puntos en estas dos primeras carreras”, declaró Solans en los días previos al evento sudamericano del WRC.