Thierry Neuville y Sébastien Loeb consideran que los Toyota Yaris WRC son una gran amenaza para sus aspiraciones en el Campeonato Mundial de Rallyes 2019. Los dos pilotos de Hyundai Motorsport coinciden en que el ritmo demostrado por Ott Tänak, Kris Meeke y Jari-Matti Latvala es un indicativo de que pueden ser rivales a batir un año más, siendo Toyota Gazoo Racing los vigentes campeones de constructores.
Pese a que las aspiraciones a ganar el rallye se esfumaron en la primera etapa, primero con la cancelación de un tramo nevado cuando ellos montaron neumáticos de clavos y segundo con los problemas de Tänak y Meeke (un pinchazo para uno y una rotura de llanta para otro), el ritmo quedó más que demostrado. En total, los Toyota llegaron a marcar 9 scratch de un total de 16 tramos cronometrados de los que constaba el itinerario de la prueba alpina.
Tänak perdió varios minutos, pero a base de remontar y de ritmo puro logró alcanzar el tercer escalón del podio, rebasando por el camino tanto a Loeb como a Latvala. Meeke perdió más tiempo con la llanta rota, pero logró reservar neumáticos en la última etapa y se llevó el Power Stage, logrando 5 puntos extra al superar tanto a Tänak como a Neuville y Sébastien Ogier, los dos que se jugaban la victoria hasta el último metro en el Col de Braus.
“Son peligrosos, lo hemos dicho antes y lo volvemos a ver aquí. Espero que podamos extraer más de nuestro coche, seguimos dando caña. Pero la velocidad de Tänak era tremenda y luego Kris en el Power Stage – vale, guardó neumáticos todo el día para esto, pero fue cuatro segundos más rápido que todos y seis segundos mejor que nosotros. Eso es mucho”, declaró Neuville según Motorsport.com.
“Sabemos la velocidad que tienen Tänak y Toyota, pero el tiempo que hizo Kris en el Power Stage es increíble”, comentó a su vez Loeb. Tänak logró adelantarle en el último tramo después de que estuviera un minuto y medio por detrás del 9 veces campeón mundial en la primera etapa después del pinchazo. Loeb, al igual que Latvala, tenía a su vez el hándicap de una posición de salida en la que tenía la pista algo más sucia de los cortes que hacían los pilotos que salían delante de ellos, ensuciando de barro o nieve la carretera.