Andreas Mikkelsen ha terminado la primera etapa del Rallye de Portugal con una cómoda ventaja dentro de la categoría WRC2, siendo la primera prueba de tierra que disputa con el Skoda Fabia R5. Teemu Suninen se sitúa en segunda posición con uno de los Ford Fiesta R5 del equipo M-Sport mientras que Pontus Tidemand, con el otro Fabia R5 oficial, se encuentra pegado al finés en tercera posición.
Desde el primer tramo del día, Mikkelsen comenzó a ejercer un dominio bastante destacado con su Skoda Fabia R5, alejándose tanto de los pilotos apoyados por M-Sport (Suninen, Pierre-Louis Loubet y Eric Camilli) como de su propio compañero de equipo en Skoda Motorsport Tidemand. En apenas tres tramos, los cinco primeros estaban ya separados por más de medio minuto mientras que el sexto clasificado, Loubet, estaba ya a más de un minuto.
El noruego continuaba aumentando distancias a lo largo de la etapa mientras que Tidemand aguantaba los ataques de Suninen, con Camilli en cuarta posición a quince segundos de su compañero de equipo al final del primer bucle. Suninen lograba adelantar a Tidemand en el quinto tramo que comenzaba el segundo bucle del viernes, logrando poner tierra de por medio mientras trataba de remontar tiempo frente a Mikkelsen – no lo conseguía ya que este era capaz de controlar las distancias sin errores a lo largo de todo el día.
Ni en el segundo bucle ni en las dos pasadas por el tramo urbano de Braga Mikkelsen dio opciones, terminando el día en una dominante primera posición por un minuto de ventaja sobre Suninen y Tidemand. Quentin Gilbert ocupaba la cuarta posición por delante de Camilli (que se quedó sin dirección asistida en la segunda pasada por Ponte de Lima), dejando a Simone Tempestini, Max Vatanen, Miguel Campos y Lukasz Pieniazek.