M-Sport está desarrollando un coche de rallyes eléctrico basado en el Ford Fiesta, según ha asegurado su máximo responsable Malcolm Wilson al medio Motorsport News. Este prototipo podría estar en acción para finales de 2018 y podría ser la antesala de coches de rallyes con tecnología eléctrica que, en el futuro, llegarán a verse incluso en el Campeonato Mundial de Rallyes.
Ya el pasado mes de enero Wilson contó a Revista Scratch que M-Sport estaba trabajando en proyectos eléctricos de cara al futuro, conscientes de que la tecnología eléctrica es el camino que se seguirá en años venideros. En aquel entonces, Wilson comentó que se iba a hacer un programa para buscar maneras de hacer viable la tecnología eléctrica en competición – de ahí que se vaya a usar una mula de pruebas para llevar adelante este estudio.
El prototipo que se verá contará con la carcasa externa de un Ford Fiesta R5 y tiene el objetivo de correr en algún momento en carreras nacionales (rallyes que se disputen en un solo día) y que se puedan mantener con un precio competitivo. Más adelante, cuando se termine el ciclo de normativa de los actuales World Rally Car, cabe la posibilidad de que la tecnología eléctrica se aplique a los coches de la máxima categoría.
“Ya sabéis como somos en M-Sport, siempre buscamos maneras de retarnos a nosotros mismos. Y este es el siguiente paso en la tecnología en el automovilismo. No puedo dar detalles técnicos porque estamos trabajando con otras compañías que comparten esta visión y hemos firmado acuerdos de confidencialidad, pero se puede decir que si todo sigue como hasta ahora y continuamos progresando espero tener un coche de este tipo corriendo este año. Sería algo en una carrocería R5, no sería el coche acabado”, declaró Wilson al respecto.
“De momento no tiene que ver con el Mundial de Rallyes. Lo que me interesa empezar ahora es producir un coche que sea capaz de ganar pruebas de un solo día y salga por un precio razonable. Hay mercado para un coche 4x4 así y estoy seguro de que existe la tecnología para hacerlo. Si se mira un coche moderno eléctrico (de calle), son capaces de hacer entre 480 y 560 kilómetros”, añadió Wilson.
“Este no es el horizonte inmediato para el WRC, no olvidemos que nos quedan al menos tres años de esta fantástica normativa nada debería llegar y poner en peligro esa estabilidad que tenemos. Pero mirando aún más hacia delante, tenemos que mirar potenciales soluciones eléctricas y esta es una de las razones por las que estamos trabajando en esto”, completó.