Una de las noticias más remarcables del pasado Rallye de Suecia fue la victoria del japonés Takamoto Katsuta, copilotado por Marko Salminen, al volante de un Ford Fiesta R5 no oficial y calzado con neumáticos Pirelli. No sólo ha sido sorprendente la victoria en sí, sino cómo se ha producido ésta, ya que ha sido tras vencer en 10 de los 19 tramos de la cita sueca y luchando al segundo contra toda la potencia del equipo oficial Skoda, dominador de la categoría en los últimos años. El otro hito viene dado porque el Ford Fiesta R5 del TMR (Tommi Makinen Racing) estaba calzado con neumáticos Pirelli.
Las estadísticas nos recuerdan que exactamente se produjo la misma combinación, piloto y coche no oficial calzado con Pirelli, hace menos de un año, en el Coates Hire Australian Rallye de 2017 donde el joven Kalle Rovanpera se impuso con un Ford Fiesta R5 en la clasificación del WRC2, pero en ese caso la lista de inscritos en la categoría era mínima, concretamente de uno solo, el propio piloto finés, por lo que a efectos extra estadísticos no la tomamos en cuenta.
El dominio de Michelin en la categoría es absoluto, con 26 victorias de las últimas 28 pruebas disputadas. Otros dos fabricantes de neumáticos han estado involucrados en ese tiempo en la categoría, Pirelli y DMack, que aun realizando un gran esfuerzo, se han quedado casi huérfanos de resultados. El dominio se produce porque los dos grandes equipos oficiales, Skoda y MSport, confían en los neumáticos franceses para sus coches y, dado su potencial, han acaparado 19 victorias de 26 pruebas disputadas desde Enero de 2016. Los únicos pilotos capaces de romper ese monopolio, en algunos casos compitiendo con importante apoyo de la marca, han sido Suninen, Fuchs, Rovanpera, Huttunen, Veiby y Katsuta, una lista muy reducida y de la que la mayoría ha pasado a un equipo oficial más adelante.
Por eso es tan importante la victoria de Katsuta en el Rallye de Suecia. Parecía imposible romper el dominio de los oficiales luchando de tú a tú y con armas distintas, pero la irrupción de este valiente piloto japonés, que lleva unos años de desarrollo al amparo de Toyota junto con su compatriota Hiroki Arai, ha roto con la “tradición” en la categoría. Demuestra que ni los oficiales son intocables, ni es necesario llevar obligatoriamente Michelin para ganar.
Si Pirelli ha conseguido la victoria únicamente en dos ocasiones de las últimas 26 citas, más lejos aún está la última victoria de un neumático DMack en una cita del WRC2, concretamente en Suecia 2015, donde Jari Ketomaa y Eivyn Brynildsen le dieron al fabricante inglés la victoria y un segundo puesto. Nil Solans es el representante de DMack en el WRC2 2018, por lo que esperamos / deseamos que pueda volver a romper el monopolio al igual que ha hecho el japonés en Suecia. En cualquier caso es un golpe de frescura que ha removido el estatus del WRC2, bienvenido sea.