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Roberto Rozada ha comenzado su debut en el Campeonato Mundial de Rallyes de manera atropellada, teniendo un malentendido con los comisarios de la FIA. El motivo de ello ha sido la colocación de los neumáticos, proceso que difiere del WRC al Campeonato de España de Rallyes de Tierra en el que participa de manera habitual.
Rozada y su copiloto Alejandro López fueron llamados por los comisarios a las 22:20 del pasado jueves trece de octubre cuando vieron que los neumáticos de su Mitsubishi Lancer Evolution X no estaban marcados. La respuesta fue que en el Nacional de Tierra no los marcan y, por tanto, no estaban acostumbrados a esta normativa, más en su primera carrera mundialista.
A los quince minutos llegó David Quijada como representante de Rozada, coincidiendo en la explicación que dio el piloto. Ahora bien, los neumáticos colocados resultaron ser los que había marcado la FIA, pero estaban al revés de manera que las marcas estaban en la parte interior del Lancer Evolution X.
Pese a la inocencia del error, los comisarios lo consideraron una práctica en contra del Artículo 60.1.4 de la normativa deportiva del WRC. Según el artículo 12 del código deportivo de la FIA, Rozada y su equipo ha recibido una reprimenda así como una multa de doscientos euros.